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El Colegio Nacional rindió homenaje al Dr. Mario Molina
«Mario Molina además de haber sido un gran científico, fue un humanista y un defensor de la naturaleza también nuestro colega, colega que admiramos, recordamos con mucho cariño y con mucho respeto» : Dra. Julia Carabias.
El Colegio Nacional organizó un homenaje el 19 de noviembre del 2023 al Dr. Mario Molina (quien fue miembro del Colegio Nacional) y estuvo dirigido por Julia Carabias y José Sarukhán.
En dicha ceremonia se develó un retrato del Dr. Mario Molina elaborado por Enrique Estrada, artista plástico chiapaneco, discípulo de David Alfaro Siqueiros. Dicho retrato se integrará a la galería de los miembros fallecidos de El Colegio Nacional.
Por otro lado se proyectó un video en el que participaron el doctor Antonio Lazcano, miembro colegiado; Francisco Barnés, ex rector de la UNAM y amigo del homenajeado, y Carlos Mena, asociado fundador del Centro Mario Molina.
El ex rector de la UNAM y coordinador Nacional de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad, el Dr. José Sarukhán, recordó a su buen amigo Mario Molina. El Dr. Sarukhán resalta la importancia del trabajo de Mario Molina ya que es la única vez que se logró una situación de consenso de hechos sobre un problema global de nuestro planeta.
El Dr. Sarukhán interactuó varias veces con el Dr. Molina al llegar a México después de recibir su Premio Nobel, y de manera muy especial el Dr. Molian dedicó una parte de su premio monetario a establecer becas para estudiantes mexicanos que fueran a estudiar química atmosférica o temas relacionados, eso, expresa el Dr. Sarukhán, «habla mucho de su sensibilidad, de su interés, de su deseo de tener más gente formada en esta área».
Todos notaban la modestia acción de Mario Molina con el resto de los colegas, de su interés por el Colegio Nacional y en el país, el Dr. Molina una persona sumamente enriquecedora “No tengo la menor duda de que El Colegio se enriqueció enormemente, nuestra relación con él nos enriqueció a muchos, en diferentes formas.”
El Dr. Sarukhán con el Dr. Molina y Julia Carabias escribieron un libro, sobre el cambio climático pero no de manera de resultados de investigación, sino más sencillo, para que la gente pudiera entender ¿qué era el cambio climático? ¿ cómo ocurría? una de las experiencias más lindas que tuvo con el Dr. Molina.
«Esta es la breve historia de relación mía con él, corta pero enormemente intensa en esa parte en la que pudimos convivir, y siento que yo, no solamente me enriquece con ello, sino también con su presencia en este Colegio Nacional, y con su compartir de ideas y de puntos de vista en las sesiones del consejo».
El director ejecutivo del Centro Mario Molina, el Dr. Eduardo Bárzana participó en el homenaje dejando claro que la ausencia del Dr. Molina se hizo notar recientemente en los eventos de la COP26 y expresó que es una pena enorme no contar con la voz del Dr. hoy en día; “Mario Molina estuvo siempre instalado en el porvenir, en el futuro inmediato, sin supuestos ni especulaciones, con argumentos enfilados a mejorar el presente al aportar generosamente nuevas ideas y a llamar la atención de la importancia de los datos duros, alejados de la retórica». El Dr. Molina dejó una gran resonancia en el mundo científico.
“Pero también es complicado hablar del doctor Molina, por lo que implica el desagregar, ordenar y priorizar tantas de sus facetas”, resaltó el Dr. Bárzana. El director del Centro Mario Molina expresó diversas facetas y cualidades del Dr. Molina, y relató entre ellas su gracia, su gran amor por México, su gran ímpetu, su pasión por la actividad científica, su visión al futuro, y sus mensajes contundentes:
«La ciencia y el conocimiento baluartes no negociables».
El Dr. Eduardo Bárzana expresó la gran oportunidad que se nos dio con sus enseñanzas y su ejemplo de vida, «Ojalá no lo defraudemos con la oportunidad que se nos dio».
También participaron Enrique Graue, actual rector de la UNAM; Al Gore, ex vicepresidente de Estados Unidos y fundador de The Climate Reality Project; Pierre Léna, fundador de la Office for Climate Education; Wendy García Calderón, del Centro Mario Molina, y el Dr. Luis Molina, hermano del Dr. Molina, y el colegiado Vicente Quirate, quien clausuró el homenaje.
La Mtra. Wendy García Calderon, Coordinadora de Educación en Cambio Climático del Centro Mario Molina, quien le da seguimiento al trabajo que el Dr. Molina realizó con los jóvenes, afirmó que la perdida del Dr. Molina ha sido terrible en muchos sentidos, «El vacío que deja es enorme».
Sin embargo se refirió al extensivo trabajo que hizo por la sociedad mexicana y sobre todo a nivel de educación, preocupado siempre por la enseñanza, centrado en construir un mejor futuro y en la herencia de un mejor planeta a las generaciones futuras, «La ciencia, lo que había construido, era un mundo de oportunidades para nosotros».
El Dr. Molina siempre intentó impulsar la educación en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas. La Mtra. García Calderón expresó la enorme generosidad que caracterizaba al Dr. Mario Molina, siempre buscando inspirar a las personas, a niños y jóvenes.
Deja claro que el legado del Dr. Molina es enorme, y nuestra responsabilidad también lo es. El Centro Mario Molina busca que esta enseñanza del Cambio Climático sea mucho más amplia y tenga un mayor alcance, a más personas y escuelas.
“Creía que inspirar a la gente, a los niños y a los jóvenes a entender el mundo que nos rodea era una parte central sobre cómo hacer que la educación fuera mejor, con lo que el Centro creó un área para que los niños y los jóvenes pudieran acercarse a la ciencia a través de un tema tan interesante como el cambio climático.”
Minutos después de la presentación de la Mtra. Wendy García, el Dr. Luis Molina, hermano del Dr. Mario Molina, habló de una manera más intima sobre la vida del Premio Nobel de Química de 1995. El Dr. Luis Molina, lo describe como el hermano «más bueno, en todos sentidos: a José Mario nunca lo vi enojado, si acaso bastante solitario y taciturno”.
El Dr. Luis Molina llevaba una relación muy estrecha con su hermano Mario, aunque menciona el Dr. Mario Molina era una persona muy reservada de su vida personal. “El 11 de octubre de 1995, poco después de las 8 de la mañana, me llamó por teléfono un buen amigo y sin más preámbulo me dijo gritando ‘Mario Molina, Premio Nobel de Química’; al principio no entendí de qué se trataba y sólo quedé un poco aturdido, después de la tercera vez que me lo repitió comprendí que mi hermano acaba de ganar el gordo.” Luis Molina no dudo en felicitarlo y acompañarlo a recibir su premio nobel, junto con todos sus hermanos y familiares. Se alistaron 12 miembros de la familia directa, el Dr. Mario Molina era el único con tantos invitados, dicho suceso no sorprendió a muchos, ya que eran mexicanos.
El día de la ceremonia el Dr. Luis Molina tuvo un gran aprendizaje: “Platicaba con el sobrino nieto de Alfred Nobel, al que habíamos conocido un par de días antes, y me preguntó si consideraba al premio Nobel como importante y le respondí que sí: ‘pues bien’, me dijo muy serio, ‘es importante gracias a gente como Mario’. En una frase entendí que Mario Molina no se ganó el gordo con el Nobel, sino que el premio se ganó a Mario Molina, a un pionero en entender el problema más grave que concierne a la supervivencia misma de la humanidad, el cambio climático.”
En un mensaje muy emotivo y lleno de nostalgia, Luis Molina comparte con nosotros la extraña manera en como la muerte seleccionó las fechas en su familia:
“El 11 de octubre 1988 falleció Leonor, mi hermana mayor, el 10 de diciembre de 1979 murió en un accidente Javier, mi hermano menor: a José Mario le otorgaron el premio precisamente el 11 de octubre y se lo entregaron el 10 de diciembre: 25 años después, el mismo día en que otorgaron el Nobel de Química 2020, 7 de octubre, falleció mi hermano. Se fue un ser humano que deja un terrible hueco no sólo en nuestra familia, sino en la investigación en México y el mundo. Un mes y medio después, el 30 de noviembre, murió mi otro hermano, Roberto. Dicen que de COVID, pero estoy seguro que de tristeza.”
Vicente Quirarte, miembro de El Colegio Nacional, clausuró el homenaje luctuoso a Mario Molina con estas palabras:
“Es preciso enfatizar estas palabras, porque como el auténtico sabio que era, Mario Molina fue un hombre sencillo, que no buscó más honores y recompensas que el bien de los otros. Fue aliado y defensor del hogar común que compartimos y, en ese sentido, fue nuestro prójimo, el ser más cercano a nuestros afanes”
El Centro Mario Molina está sumamente agradecido con el Colegio Nacional, para más detalles del evento les compartimos enlaces de su interés:
Video completo del Homenaje por parte del Colegio Nacional
«A un año de su muerte, dedican homenaje a Mario Molina, Premio Nobel de Química»: Milenio
«El Colegio Nacional rinde homenaje a Mario Molina»: La Crónica
CENTRO MARIO MOLINA PARA ESTUDIOS ESTRATÉGICOS SOBRE ENERGÍA Y MEDIO AMBIENTE
CDMX